Como cada año, el recorrido fue apasionante, entretenido y superable, siempre que se contase con un mínimo de preparación ya que se encontraba desprovisto de grandes dificultades montañosas a lo largo de sus 115 kms.
A través de carreteras idóneas para la práctica del ciclismo se bordearon preciosas zonas costeras, para a continuación adentrarse en hermosos valles, característicos del interior de Bizkaia.
Desde sus comienzos, allá por el año 1988, la “Marcha Ciclista BILBAO-BILBAO” se ha caracterizado principalmente por dos aspectos. El primero y esencial fue concebir, esta prueba como un acontecimiento cicloturista, apto para todos los ciclistas y el segundo punto que define y caracteriza a la BILBAO-BILBAO, son los formidables medios de todo tipo que se ponen a disposición de los participantes y que consiguen que ese día, cada uno de ellos, se sienta y viva esta “Marcha” como un auténtico protagonista.
La salida se daba de forma escalonada cada 15 minutos, y en el momento de llegar al final, cada participante recibió un bonito trofeo.
A pesar de la fría y húmeda mañana, la marcha fue perfecta y nuestros dos socios completaron el recorrido con solvencia, y deseando repetir el año que viene.
Vídeo que resume fotográficamente la ruta:
El año que viene a repetir.
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